Buenos días! Ya sabéis que no soy muy de verdes en decoración, sin embargo este apartamento sueco en tonos blancos, grises y pinceladas de verde me ha encantado. Creo que la mezcla de muebles de diseño con piezas de herencia restauradas, es un gran acierto (como casi siempre). La luz, potenciada por los suelos también pintados en blanco, las grandes ventanas y los techos altos, es también muy protagonista en la vivienda. Así que, los toques en verde en complementos, plantas, etc consiguen enriquecer el conjunto, dándole mucha personalidad.
Este apartamento en Estocolmo, de estilo nórdico del acogedor (que yo lo llamo) con tan solo 70m2, cuenta hasta con una habitación extra que puede ser utilizada como estudio, o cuarto de los niños. Simplemente, con la decoración despejada, y la luminosidad, consiguen multiplicar los metros y al final, parece muuuucho más grnade... Verdad??
Feliz domingo!!